Hace unos días me encontré frente a la plaza Kompuchewe (*) un muchacho que me contó que gracias a mi fumó con la abuela. La doña, según me cuenta, está chocha con el descubrimiento porque puede eliminar la pastilla de la presión y la pastilla para dormir con un par de secas.
Como si fuera poco, y para confirmar la versión, aparece la abuela en cuestión quien, luego de saludar, confiesa haberse fumado una tuca con el nieto antes de salir de compras. Para rematarla me pide el teléfono para ir a tomar unos mates y charlar un poco.
Vénga nomás doña! Traiga torta pa`los mates que la yerba la pongo yo!
Como si fuera poco, y para confirmar la versión, aparece la abuela en cuestión quien, luego de saludar, confiesa haberse fumado una tuca con el nieto antes de salir de compras. Para rematarla me pide el teléfono para ir a tomar unos mates y charlar un poco.
Vénga nomás doña! Traiga torta pa`los mates que la yerba la pongo yo!
(* ) Si, la plaza Kompuchewe. La que antes se llamaba Roca, pero siempre le dijimos "la 83".
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